Inteligencia Artificial es un terreno aún en estado inicial de desarrollo en el Perú. Los first movers en el uso de estas herramientas han sido los bancos, quienes se han encargado de aplicarlas para la consulta de dudas y reclamos y, por otro lado, para la captación de nuevos clientes para los diferentes productos financieros disponibles. No obstante, queda mucho espacio por explorar en el Perú. Manufactura representa un potencial alto en tanto crezca el uso de la robótica en labores de complejidad baja e intermedia y muy repetitiva.
Diario Gestión conversó con Edison Medina, Director del Diplomado Internacional en Business Intelligence & Analytics en la UPC, y aunque el desarrollo de IA en nuestro país está en sus inicios, augura un futuro promisorio de esta tecnología.
En líneas generales, ¿cómo ves el estado de la aplicación de herramientas de Inteligencia Artificial en el Perú?
Es un terreno todavía de bastante desarrollo. Definitivamente se han realizado ciertos esfuerzos durante los últimos años. Han sido los bancos, por contar con los recursos requeridos para su transformación, los primeros en dar ese paso. Por ejemplo, tenemos al BCP y su “Arturito BCP” (un chat cognitivo para Facebook Messenger que permite realizar consultas y resolver dudas sobre cuentas y tarjetas).
Sin embargo, todavía queda mucho espacio por explorar en el Perú.
¿Qué falta para que dicho desarrollo se profundice?
Siempre hay un primer grupo de innovadores que se encargarán de iniciar el camino. Sucede que la gran masa de empresas esperan que este primer grupo valide sus nuevas tecnologías para luego el segundo grupo en mención adopte estos nuevos avances.
Finalmente, es un tema de decisión. Quienes adviertan los beneficios tangibles que trae lo digital, pasarán al grupo de los innovadores y generarán claras ventajas respecto de su competencia.
¿Cuáles son las industrias/negocios en los que es más obvia la aplicación de herramientas de Inteligencia Artificial?
En el Perú ya estamos expuestos a los avances en materia de transformación digital que están aplicando los bancos. Básicamente, el uso de data e IA se están aplicando para la consulta de dudas y reclamos y, por otro lado, para la captación de nuevos clientes para los diferentes productos financieros disponibles.
Fuera del Perú, crece el uso de la robótica en la industria manufacturera, sobre todo en laborales de intermedia complejidad y muy repetitiva. Recientemente, leí que en Asia, en Manufactura, existen empresas que han reemplazado hasta al 60% de su personal por robots. Ciertamente, esto va a seguir ocurriendo, pero se van a crear nuevos trabajos, más sofisticados, para personas.
¿Crees en el Perú contamos con el capital humano requerido para incluir Inteligencia Artificial en las empresas peruanas?
Hoy mismo ya hay escasez de profesionales en digital y tecnología. Necesitamos un refresh en las especializaciones de las carreras. En el mundo existe un desbalance entre mercados en los que sí existen profesionales muy especializados en –por ejemplo– robótica y mercados en los que aún estas carreras son incipientes.
¿Cuál es el valor de la data en los actuales tiempos de Transformación Digital?
Total. La evolución de este tema ha sido tremendo. Inicialmente, hablábamos de business intelligence, luego, de data mining. Hoy hablamos de transformación digital. Y eso es lo requerimos: promover una transformación integral. Pero todo esto está fundamentado en conseguir muchos datos. La aplicación se da en empresas tanto online (Netflix, Amazon, Google) como offline (7-Eleven, Starbucks), que basan todo su quehacer en el manejo de datos. A ellas las llamamos “empresas analíticas”.
En el Perú el uso de Inteligencia Artificial en las empresas u organizaciones crece. Los beneficios se expresan en fidelización: las empresas, al conocer cada vez mejor a sus clientes, pueden desarrollar estrategias focalizadas de marketing con altos índices de éxito. Un ejemplo es Netflix, que rastrea las preferencias de tus series y toma data de tus redes sociales; así, te conoce a la perfección. El resultado: la fidelización de los 75 millones de clientes que tiene esta plataforma online.
Asimismo, la data ayuda a optimizar recursos. Un ejemplo simple es de la gestión de cobranzas. Son múltiples los medios que se usan para cobrar: mailing, call-centers, correo tradicional, visitas. Se sigue evaluando solo el ratio de cobranza, pero no los recursos utilizados. Sin embargo, si se supiera en profundidad a quién le estamos cobrando, el uso de recursos sería mucho más eficiente (por ejemplo, con un deudor con historial crediticio positivo, no agotas todos los recursos).